La primera vez que lo oí las palabras Geometría Sagrada no sabía por dónde iban los tiros, pero me interesó en cuanto me explicaron, un poco por encima, de que iba el tema.
En realidad, la Geometría Sagrada o Natural,(como diría un profe que tuve), trata del intento del ser humano de imitar a la naturaleza.
La naturaleza es geometría, es proporción. En la naturaleza todo tiene sentido, nada está dejado al azar. En la antigüedad, las personas estaban mucho más conectadas con la naturaleza de lo que estamos ahora, observaban e intentaban imitarla, porque veían que en ella había armonía y equilibrio.
Lo que hoy llamamos Geometría Sagrada, era utilizada en la construcción de templos, viviendas, ciudades, lugares sagrados. En el presente, sabemos cómo usar los números, conocemos las formulas, podemos calcular las medidas que necesitamos para poder utilizar este arte en armonizaciones globales. Los antiguos maestros de obra y los constructores no contaban con estos avances, pero tenían sus propios métodos.
A la hora de realizar una construcción, previamente se elegía el lugar donde se iba a ubicar el templo o lo que le encargaran al constructor. Estos lugares tenían ciertas características entre las que se encuentran las venas de agua y las fallas. El siguiente paso era conocer la medida del lugar, para ello, el día del solsticio de verano, al mediodía, el maestro de obra colocaba una vara de 1 metro en el lugar elegido previamente y media la sombra proyectada por la misma.
A partir de ese momento, el maestro se retiraba, pudiendo estar hasta 2 años trabajando en planos que se basaban en la medida dada por la proyección de la sombra de la vara y sus proporciones. Cuando terminaba los planos, volvía al lugar donde se iba a construir y empezaba el trabajo. El maestro de obra, normalmente, estaba vigilante para que todo se hiciera como estaba escrito. Entre otras cosas se tenía en cuenta los tamaños de las piedras, su polaridad, la orientación del altar al este, la entrada por el oeste y muchos detalles más.
Una vez acabada la construcción, la energía del edificio quedaba transformada. Por ejemplo, una vena de agua, que habitualmente es perjudicial para las personas expuestas a ella debido a un cambio de polaridad desequilibrante, en los lugares sagrados no actúa así. El altar suele estar ubicado en uno de los puntos más energéticos del templo que suele coincidir con la vertical de un cruce de aguas subterráneas , incluyendo a veces también otro tipo de cruces telúricos sobre todo sobre los denominados cruces Curry
El tema es muy interesante, de hecho, una compañera y yo misma hemos hecho algunos cursos de Geometría Sagrada, aplicando lo aprendido en el trabajo de armonización integral de una casa y la verdad es que el resultado ha sido interesante y excitante, no nos lo podíamos creer.
Hay sitios que están muy alterados telúricamente y actuar localmente suele ser costoso y agotador, en cambio, si hay posibilidad de actuar globalmente, el trabajo es bonito y el resultado gratificante.
¿Qué conseguimos con una actuación global? Creamos un ritmo, que es precisamente el del lugar
Creamos armonía y equilibrio. Las alteraciones telúricas que hubiera se transforman y se armonizan. Tengo una porción de huerta y por primera vez he utilizado la Geometría Sagrada para crear un lugar armónico y equilibrado. Dicen que la producción se incrementa en un 20%, no lo he visto, pero espero comprobarlo en este mismo año.
Espero que os haya resultado interesante el artículo de Geometría Sagrada, a mí, desde juego, me lo pareció cuando lo descubrí.
Artículo escrito por Idoia Zabala
Bueno , la geometria sagrada es mucho mas que eso, he publicado algunos articulos en mi blog en los que hablo de diversos aspectos de relación entre las proporciones de la vida y la evolución en el planeta http://creixementevolutiu.wordpress.com/2012/02/14/geometria-sagrada-uns-patrons-universals/
ResponderEliminar